La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) ha sacado a concurso la concesión de la dársena de Poniente en el puerto de Ibiza. Estos amarres, ubicados en 20.099 metros cuadrados de lámina de espejo de agua, se comercializan actualmente bajo la marca Marina Port Ibiza y están gestionados desde 2020 por la sociedad Tanit Ibiza Port S.A.

El Consejo de Administración del ente portuario aprobó ayer los pliegos de bases y cláusulas de explotación que tienen que regir el concurso público para el otorgamiento de esta autorización para la explotación de unos 90 puestos de amarre para embarcaciones de náutica recreativa en la dársena de Poniente del puerto de Eivissa.

Se trata de una zona en el puerto de Ibiza muy codiciada. Por una parte, el nuevo concesionario gestionará una serie de amarres de esloras hasta 15 metros distribuidas en dos pantalanes flotantes. Sin embargo, la parte más rentable son la docena de amarres para superyates, de hasta 60 metros de eslora, que están situados en la línea de atraque de poniente del contramuelle, conocido como es Martell, a los pies de Dalt Vila y en pleno centro histórico de la ciudad.

La actual concesionaria, Tanit Ibiza Port S.A, tenía concedida una prórroga por parte de la APB que vence el próximo 5 de junio y el ente portuario espera poder adjudicar el concurso antes de esa fecha y poder realizar el traspaso justo al inicio de la campaña estival.

El tiempo de duración de la nueva autorización será de cuatro años, con la posibilidad de dos prórrogas de un año cada una. La cuantía anual de la tasa de ocupación será, como mínimo, de 579.000 euros, una cifra que todo apunta a que será ampliamente superada por los ofertantes. En estos momentos, el actual concesionario paga a la APB cerca de 2,6 millones de euros al año entre tasas y mejoras.