Los pescadores de Baleares piden amparo ante Bruselas. La flota balear se queja de que las medidas pesqueras de la Unión Europea a cargo de la Comisaría de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, son tremendamente restrictivas.

Los pescadores piden una regulación regionalizada que valore la situación y las circunstancias de cada zona y de cada flota pues las medidas globales que se emiten desde Europa están aplastando la pesca balear, ya redimensionada desde hace décadas en un archipiélago que además cuenta con muchas reservas marinas para garantizar la protección del ecosistema.

Desde las Islas denuncian que estas medidas restrictivas tienen sentido para grandes flotas como las que faenan en otros países. Sin embargo, según denuncia el presidente de la Federació Balear de Confraries de Pescadors, Domingo Bonnín: “La flota balear de arrastre se ha redimensionado por sí sola durante las últimas décadas y las nuevas restricciones nos están ahogando poco a poco y, de seguir así, nos llevarán a la extinción”.

Dos eurodiputados del Partido Popular, la balear Rosa Estarás y el canario Gabriel Mato quisieron ayer conocer las peticiones de los pescadores de las Islas y compartieron ayer un almuerzo con ellos a bordo de una de las barcas de arrastre que está amarrada en el puerto de Palma. También asistió al encuentro el máximo representante en España de las cofradías pesqueras, José Basilio, presidente de la Federación Nacional de Cofradías. Los políticos escucharon durante más de dos horas a los pescadores y se comprometieron a defender sus intereses en Bruselas.

Una de las peticiones de los pescadores es que la pesca se segregue de la Comisaría de Medio Ambiente, Océanos y Pesca “más preocupada por establecer restricciones medioambientales que por ordenar y gestionar la pesca en el ámbito europeo”, según señala Bonnín.

Las cifras difundidas por los pescadores profesionales son escalofriantes. Solo el 10 por ciento del pescado que se consume en Baleares procede de nuestras aguas. “El salmón es el pescado más consumido aquí” comenta con amargura Bonnín. Los poco más de treinta barcos que componen la flota balear de arrastre capturan el 80% del pescado en las Islas. “Si esa flota se pierde, simplemente la presencia de pescado balear en los mercados prácticamente desaparecerá”, explica Bonnín.

Las barcas de bou en las Islas han ido desapareciendo poco a poco en las últimas décadas. Según el Informe Mar Balear de la agrupación ecologista Fundació Marilles, la flota se componía en 2021 de 33 embarcaciones y se había reducido un 65 por ciento desde 1975 y un 25 % desde 2015.

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