Imagen aérea del varadero de mantenimiento del puerto de Palma.
Desde que empecé a trabajar para el sector náutico a través de Balearic Marine Cluster en febrero de 2021, llevo escuchando, prácticamente a diario, la misma canción por parte de las empresas del sector: “No encontramos personal cualificado”.
Independientemente de que la empresa sea grande o pequeña, de habla castellana o inglesa, todas coinciden en el problema de encontrar personal en cantidad y calidad suficiente para cubrir su demanda de trabajo.
Hace aproximadamente un año cayó en mis manos el informe “Panorama de la Educación Indicadores de la OCDE 2022” para poner, al fin, cara al problema endémico que tenemos como nación y que repercute directamente en las empresas del sector náutico de Baleares.
El problema no es la caña, es el caladero. Y es que empresas náuticas punteras en su área hay a raudales en Baleares. Empresas atractivas, solventes, internacionales, dinámicas y capaces de atraer talento, tenemos en nuestra comunidad todas las que queramos y más. Lo que sufren las empresas náuticas de Baleares es solo un ejemplo de las consecuencias del mal endémico que tenemos en nuestro país.
Según el informe publicado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, solo el 23,2% de la población adulta (25-64 años) tiene formación secundaria (ESO o FP Grado Medio) frente a un 40,7% que tiene educación terciaria (FP Grado superior, Grado, Master y Doctorado). Por último, un 36,1% de la población adulta cuenta con educación primaria (infantil, primaria o primera etapa de educación secundaria).
En resumen, en España tenemos un gran porcentaje de profesionales muy preparados para desarrollar trabajo de oficina o de gestión, un gran porcentaje de personas sin formación específica y un porcentaje bajo de profesionales debidamente formados para desarrollar los trabajos técnicos, propios de cada sector.
Si comparamos los datos de población adulta de España (PIB 2022 – 1.328.922 M€) con tres de las principales potencias industriales vecinas como son Alemania (PIB 2022 3.867.050 M€), Francia (PIB 2022 – 2.642.713) o Italia (PIB 2022 – 1.909.154 M€) vemos como nos doblan en población adulta con formación secundaria. Esto significa que cuentan con el doble de mano de obra cualificada que nosotros para impulsar el crecimiento y desarrollo de sus empresas.
Volviendo al Sector Náutico de Baleares, les propongo hacer un ejercicio, puramente teórico, basado únicamente en los datos publicados en el informe al que hago referencia durante todo el artículo.
Si analizamos exclusivamente el 23,2% de la población adulta graduada con educación secundaria, vemos como solo el 35,3% obtienen titulaciones profesionales (FP) frente al 64,7% que obtiene titulaciones generales académicas (ESO).
Yendo un poco más al detalle, si analizamos únicamente el 35,3% de la población que se ha graduado obteniendo una titulación profesional, observamos como solo un 15% de estos lo hace en ramas de ingeniería, producción industrial y construcción, área donde se encuentra la familia de Transporte y Mantenimiento de Vehículos.
Si suponemos, siendo generosos, que un 5% de los graduados en educación secundaria, que obtuvieron titulación profesional en el área de ingeniería, producción industrial y construcción, lo hubiesen hecho en la familia de Transporte y Mantenimiento de Vehículos (Rama Náutica) y aplicásemos todos estos coeficientes reductores a la población de Baleares de entre 18 y 30 años (Según el INE 184.425,00 personas), tendríamos en baleares a 114 personas formadas debidamente para desarrollar trabajos de reparación y mantenimiento naval al año.
Tal y como he comentado al principio del ejercicio, es un análisis puramente teórico y el dato final carece de importancia si se analiza de forma aislada. Sin embargo, si analizamos el conjunto, vemos como España, y por ende el sector náutico de Baleares, tiene una enfermedad endémica, que es el bajo porcentaje de población joven verdaderamente formada y cualificada para impulsar el tejido industrial de nuestro país.
Poniendo cifras a un problema que me trasladan a diario las empresas, confirmo que el problema de la falta generalizada de personal en el sector náutico, ni es un problema exclusivo de las condiciones, ni del precio de la vivienda, ni de la fuga de talento hacia otros sectores, sin menoscabo de la importancia que estos asuntos representan también para las Islas. El problema es que no hay peces en el caladero, por lo tanto, por muy buena que sea la caña, nos iremos a casa “fent un 0”, como dicen los pescadores de estas maravillosas Islas.
El futuro no es demasiado prometedor si seguimos con las mismas técnicas de pesca. El sector náutico necesita marketing, necesita inspirar a los jóvenes de nuestras islas, necesita presentarse como es debido y generar la atracción que otros sectores generan en las nuevas generaciones.
Todos los que trabajamos en este sector tenemos en algún lugar la chispa que nos empujó a decantarnos por el mar. Solo se trata de trasmitirla a las nuevas generaciones.
---
Pedro Suasi es gerente en Balearic Marine Cluster